Si durante una merienda al aire libre se os acerca un insecto con rayas amarillas y negras estoy seguro de que lo dejaríais en paz por miedo a una picadura. Al reaccionar así estamos, sin darnos cuenta, reforzando una precaución muy extendida en el reino animal en cuanto a los patrones amarillos y negros, que suelen ser sinónimos de peligro. A este fenómeno se le conoce como aposematismo cromático.
Básicamente el aposematismo consiste en llamar la atención. De la misma forma que después de andar 15 minutos por una calle es más fácil que recordemos a un tío con cresta teñida de rojo, camisa amarilla y botas negras que a un señor con gabardina gris, los animales aposemáticos emplean ciertos colores para causar una honda impresión en el resto.
Resulta sorprendente que los colores más efectivamente aposemáticos son los mismos en todo el reino animal: el negro, el rojo y el amarillo. Las combinaciones de dos de estos colores o de los tres a la vez resultan especialmente chillonas. Esto es más importante de lo que pueda parecer ya que el resto de los animales tienen una memoria más reducida que la de los primates y cualquier mecanismo que ayude a fijar en la misma algún tipo de información puede resultar de vital importancia. Un detalle de interés es que estos colores no tienen porqué ser considerados peligrosos en sí, sino que pueden transmitir una señal de advertencia como consecuencia de un condicionamiento etológico. Me explico: un pajarillo, recién salido del nido, es atraído por una larva de coleóptero de color rojo y negro. El pájaro, curioso e inocente por su inexperiencia, no puede evitar acercarse e intentar comérselo y entonces se da cuenta del intenso y repugnante sabor que tiene. La larva de ese insecto muere mutilada finalmente, pero el pájaro asociará para el resto de su vida el inolvidable patrón rojo y negro con un sabor repugnante: el sistema ha funcionado y la inmensa mayoría de las larvas de ese insecto viven sin ser molestadas.
Aquí algunos otros ejemplos de aposematismo animal:
Y para demostrar que no somos inmunes a la efectividad de los colores aposemáticos para llamar la atención o transmitir precaución o peligro, aquí unas muestras:
Otro concepto relacionado con el aposematismo es el mimetismo. Mimetismo significa imitar, por lo que un insecto de color verde que se confunde entre la hierba no es mimético, como se suele decir. Sería mimético si, por ejemplo, imitara la forma de una hoja; cuando su color simplemente le ayuda a camuflarse en su entorno no se habla de mimetismo sino de cripsis. Hay dos mimetismos relacionados con el aposematismo.
El mimetismo mulleriano (descubierto por Fritz Müller) tiene lugar cuando un conjunto de especies imitan un determinado patrón aposemático para reforzar el mensaje de peligro. La mayoría de las avispas son negras y amarillas manteniéndose así bajo el mismo tipo de protección. Si, por ejemplo, una de las especies de avispas se volviera espontáneamente azul y marrón no podría beneficiarse del secular miedo a las rayas negras y amarillas que tiene todo hijo de vecino que haya sufrido una picadura, y además sería una combinación de colores poco chillona y más difícil de recordar.
El mimetismo batesiano (descubierto por Henry Walter Bates) es, sin embargo, el triunfo de la picaresca. Especies de animales absolutamente inofensivas imitan un patrón aposemático para que nadie les moleste. Este fenómeno se puede observar, por ejemplo, en familias de moscas que tienen patrones similares a los de las avispas. Sé por experiencia que hace falta insistencia y atención para darse cuenta del engaño. Mi ejemplo favorito de mimetismo batesiano es el de las serpientes de coral.
A la izquierda tenemos una Micrurus o serpiente de coral. Las Micrurus son muy venenosas como nos queda claro por su patrón evidentemente aposemático. A la derecha tenemos a una especie absolutamente inofensiva: la falsa coral (Lampropeltis triangulum) que astutamente reproduce el patrón aposemático de su mortífera coleguilla. La falsa coral es un recurso muy frecuente en películas de aventuras (da igual que la sitúen en Vietnam a pesar de que se trate de una especie americana). Si alguna vez os encontráis en Centroamérica, veis una serpiente de este tipo y tenéis la duda razonable sobre si salir corriendo o hacerle una foto, recordad el dicho que se emplea en la zona de origen de ambas especies: Rojo y amarillo mata al chiquillo, rojo y negro no hay peligro (en el patrón de la coral verdadera el color rojo va junto al amarillo, pero en la falsa coral no).
Pues bien, sufridas criaturas del blogoplancton que os tragáis mis rollos con paciencia infinita: ha llegado la hora de que pongáis en práctica vuestros conocimientos. Yo mismo, por razones de deformación profesional, no dudo en recibir un mensaje de precaución o peligro con los patrones aposemáticos y me gustaría que, ahora que os he puesto en antecedentes, me ayudéis a interpretar estas imágenes.
Venga, lluvia de ideas ya.
Qué estás haciendo de esta niña de letras, hijo de mi vida…Yo leyendo un texto como éste sin parpadear…Es que no me reconozco. Me ha parecido interesantísimo, de verdad. Me lo guardo para cuando explique la comunicación no verbal.
Además de la bandera española, la actual y no la buena de color morado, se me ocurren como ejemplos de aposematismo cromático la bandera nazi (fondo rojo y enseña negra), la bandera de la URSS (fondo rojo y letras amarillas)o la bandera Alemana actual (amarillo, negro y rojo). Además, dentro del mimetismo, destaca para mi la bandera belga que imita a la alemana (para que nos acojonemos)
Vaya, que interesante es todo esto.
Sí, es cierto que la bandera alemana y la belga son el colmo del aposematismo pendonil, y muy buena la propuesta de la bandera nazi y la soviética.
Todo esto viene a colación de que tanta exhibición pública de banderas españolas hasta el hartazgo (ver últimas imágenes, que seguro que todos recordamos esos encantadores momentos) me hacía pensar una y otra vez en el aposematismo.
Mi duda es: ¿Se trata de un mimetismo mulleriano o batesiano?
se me ocurre un refrán memotécnico:
Rojo y amarillo con el pajarillo !A correr rojillos¡
Así no se nos olvida
Sin embargo: Rojo amarillo y moradillo !No hay peligro¡
Toma ripios
Las fotos esas son un claro ejemplo de mimetismo batesiano, sin duda. O igual, yendo aún más lejos, se trata de una simple cripsis (de Kellogs), ya que tienen una total falta de criterio propio…
Bueno, las banderas son trapos (genial la raíz francesa -drapeaux-) Creo que incluso las verdes y blancas intentan impactar. Incluso los campos de gules.
Jajajajaj
Por no hablar de un dragón rampante bien contorneado…
No sé qué me fastidia más: que los radicales de ultra-derecha intenten apropiarse de la bandera que nos representa a todos como país, o que los demás les dejemos y lo asumamos como normal (porque la que es realmente de ellos es la del aguilucho, no la otra).
Por lo demás, muy interesante lo de la adaptación de los animales copiando a los venenosos.
Dios mio, como se te va la pinza, IM-PRESIONANTE, me ha parecido muy interesante, yo me quedo con el aposematismo batesiano. Estoy de acuerdo con Gianna, hasta el gorro de que se queden con la bandera que representa a todos lso españoles, aunque pensándolo bien, anda y que se la metan por donde amargan los pepinos.
No le falta razón a Gianna, y alguna vez he comentado ese tema, pero es que cuando las banderas a uno le parece que sólo tienen sentido en las competiciones deportivas… pues como que no apetece.
Muy bueno tu artículo. Interesante y bien escrito. Se puede leer a gusto. Gracias.
Irene
interesantisimo, me ayudo con mi tarea de Lgamiento, ès decir genes de pigmentos asociados a caracteristicas de defenza